Sharon Hurtado
9 Dic 2025
09:33 AM
Brillo total en la 44: la monarquía del Carnaval encendió la magia decembrina
En la gran parada navideña
La magia decembrina se tomó la carrera 44 con el brillante debut de la monarquía del Carnaval del Bordillo, que deslumbró a cientos de asistentes en la tradicional Gran Parada de la Luz, evento que marca el inicio de la temporada navideña y abre oficialmente el camino festivo hacia el Carnaval.
La puesta en escena de los reyes de La 44 estuvo acompañada por la carroza “Barranquilla, una gran experiencia”, un homenaje vibrante a los lugares más emblemáticos de la ciudad y a las nuevas obras que hoy la posicionan como una capital moderna y cultural. Elementos icónicos como La Luna del Río, el Puente Pumarejo, la Catedral Metropolitana y la Intendencia Fluvial se integraron en un diseño colorido que celebra la transformación urbana y el orgullo barranquillero.
Un espectáculo de brillo y fantasía
La reina Sharon Hurtado desfiló con un traje inspirado en una “Chispita”, símbolo de luz, color y alegría. Su vestuario, cargado de fantasía y exuberancia, convirtió el brillo en un lenguaje propio que acompañó cada movimiento sobre la 44.
“Este diseño es un homenaje al brillo, la magia y, sobre todo, al esplendor que iluminan las fiestas navideñas en Barranquilla”, afirmó la soberana, quien se robó las miradas durante todo el recorrido.
Un Rey Momo que enciende tradición y esperanza
El Rey Momo, Luis Mauricio Aragón, se presentó como un farol encendido que representa tradición, fe y esperanza. Su traje reflejó la esencia del espíritu barranquillero que cada 8 de diciembre enciende una luz para celebrar, agradecer, pedir, sanar y amar.
“Que esta luz llegue a todos, que alumbre los corazones y anuncie, como cada 7 y 8 de diciembre, que la Navidad ya está tocando las puertas de la ciudad más alegre del mundo”, expresó el monarca.
Los reyes infantiles iluminan la noche
Los reyes infantiles Ashley Gómez y Germán Palomino sumaron color y ternura al desfile con vestuarios llenos de simbolismo y tradición. Inspirados en las velitas de colores que las familias barranquilleras encienden dentro de faroles cada 8 de diciembre, sus trajes celebran la luz como un mensaje de alegría, esperanza y unión.
“Iluminar a todos los niños del mundo y recordar que la infancia es el corazón del Carnaval y de nuestras tradiciones”, expresó la reina infantil.
Por su parte, el rey momo infantil destacó que esta luz “marca también el inicio del camino festivo, encendiendo oficialmente el espíritu del Carnaval que está muy cerca”.
Los vestuarios infantiles resaltaron por sus tonos vibrantes, texturas dinámicas y detalles artesanales que evocaron el resplandor de las velitas y la magia del diciembre barranquillero, elementos esenciales del universo creativo del Carnaval.
Aportando a la tradición y al tejido social
Con esta celebración, el Carnaval de la 44 continúa apoyando la labor liderada por la Fundación Pan y Panela, organización que completa su octava edición promoviendo programas sociales y fortaleciendo el sentido comunitario durante la temporada festiva.
Fuente
Alerta Caribe
