Hablaba con su ex cuando lo mataron a tiros: crimen en El Bosque sacude a Barranquilla

La noche del domingo se tiñó de sangre en el barrio El Bosque, al suroccidente de Barranquilla, tras el asesinato de un joven mototaxista identificado como Diego Armando Santana Gamarra, de apenas 23 años, quien fue baleado en plena vía pública mientras conversaba con su expareja sentimental.

El crimen ocurrió sobre las 8:30 p. m. en la calle 76 con carrera 6B, cuando Diego estaba aparentemente en una charla pacífica con la joven, sin imaginar que sería su último encuentro.

Según testigos, dos hombres en moto se acercaron al lugar. El parrillero descendió del vehículo, sacó un arma de fuego y disparó sin mediar palabra. Diego recibió tres impactos de bala: uno en el cuello, otro en el tórax (lado izquierdo) y uno más en la pierna izquierda.

Vecinos del sector actuaron rápidamente y trasladaron a Diego a la Clínica San Ignacio en un intento desesperado por salvarle la vida. Sin embargo, debido a la gravedad de las heridas, fue remitido de urgencia al Hospital Barranquilla, donde los médicos confirmaron su fallecimiento minutos después.

La noticia conmocionó al barrio El Bosque y dejó en shock tanto a familiares como a amigos del joven, quien era conocido por trabajar como mototaxista en la zona y por ser una persona tranquila, según varios allegados.

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Las autoridades ya iniciaron una investigación para esclarecer los móviles del crimen. Hasta el momento, la principal hipótesis que maneja la Policía Metropolitana de Barranquilla apunta a que el asesinato estaría relacionado con una rencilla entre dos familias, aunque no se han dado detalles específicos de los antecedentes del caso.

“Estamos revisando cámaras de seguridad del sector y recolectando testimonios para identificar a los responsables”, informó una fuente policial. Hasta el momento, no se han reportado capturas por este hecho.

Este nuevo caso de violencia se suma a la preocupante ola de homicidios que afecta a varias zonas de Barranquilla y su área metropolitana. Líderes comunitarios y organizaciones sociales han pedido a las autoridades reforzar la presencia policial y a la ciudadanía evitar resolver conflictos personales o familiares a través de la violencia.

También se ha hecho un llamado a las familias involucradas, si efectivamente se confirma que hay disputas de por medio, a buscar canales de diálogo y reconciliación que eviten que más jóvenes terminen muertos en medio de conflictos heredados.

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La Policía hace un llamado a la comunidad: si alguien tiene datos sobre los atacantes o los hechos previos al crimen, puede comunicarse de forma anónima a la línea 123 o al número de emergencias del cuadrante correspondiente.