Policía de Cartagena capturó a un ciudadano chino con cargamento ilegal de aletas de tiburón

En los últimos años, los delitos ambientales en Colombia han cobrado mayor relevancia debido al impacto directo que generan en la biodiversidad y en las comunidades que dependen de los recursos naturales.  

Actividades como la deforestación, la minería ilegal, el tráfico de fauna silvestre y la contaminación de fuentes hídricas se han intensificado, lo que ha obligado a las autoridades a fortalecer la investigación, judicialización y sanción de estos crímenes. 

Es por ello que, en una operación para proteger el capital natural, la Policía Nacional en Cartagena incautó un cargamento de 26 aletas de tiburón en el barrio San José de los Campanos.  

Al parecer, las partes extraídas de los animales, que provenían del departamento de La Guajira, forman parte de una red de comercio ilícito que afecta la biodiversidad marina. 

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De acuerdo con el reporte policial, por este hecho fue capturado un ciudadano de nacionalidad china en un restaurante de comida asiática, cuando el hombre recibía un paquete con el cargamento.  

Igualmente, dieron a conocer que la operación se realizó mediante labores de seguimiento e investigación, que alertaron a las autoridades sobre la encomienda con destino al restaurante. Estando allí, el paquete fue recibido por el ciudadano chino, quien fue interceptado inmediatamente por los uniformados. Al verificar el contenido, las autoridades encontraron las partes de fauna marina en estado seco. 

Por su parte, el brigadier general Gelver Yecid Peña Araque, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena, afirmó que el resultado representa un golpe al tráfico de fauna silvestre.  

"Los ocho tiburones sacrificados forman parte de una especie fundamental para el equilibrio de los ecosistemas marinos. La caza de estas especies no solo está prohibida, sino que contribuye de manera directa a su amenaza de extinción", indicó el oficial. 

Asimismo, las autoridades revelaron que el cargamento de aletas de tiburón está valorado en el mercado ilegal en aproximadamente 90 millones de pesos. 

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En cuanto al establecimiento comercial donde se realizó la captura, este fue objeto de una suspensión temporal de la actividad por diez días, en aplicación del Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, que prohíbe el transporte, la comercialización o la posesión de especies de fauna silvestre sin la autorización ambiental. 

Entre tanto, las autoridades informaron que la información recopilada durante este procedimiento permitirá la investigación para identificar y judicializar a las personas involucradas en esta red.