Mujer oriunda de Corozal (Sucre) fue hallada muerta en el condado de Boynton Beach

Una mujer corozalera, residente en Estados Unidos y que había desaparecido desde el pasado 18 de febrero, fue encontrada muerta en su propia residencian de South East 28th Court, en Boynton Beach.

La portavoz de la Policía de Boynton Beach, Stephanie Slater, dijo el viernes por la noche que se encontraron restos humanos en una casa en Southeast 28th Court. Mary Stella Gomez-Mullet, de 45 años, natural de Corozal, Sucre, había estado desaparecida durante varias semanas.

"Nuestras más sinceras condolencias están con la familia y los seres queridos de Mary", dijo el jefe de Policía de Boynton Beach, Michael G. Gregory, en un comunicado.

"Seguimos dedicados a esta investigación en curso y a llevar justicia a su familia", agregó el oficial. 

Los registros judiciales del condado de Palm Beach muestran que se emitió un certificado de matrimonio para la pareja en enero, cuando se realizó una ceremonia en el juzgado de Delray Beach. Según una declaración jurada de causa probable, se informó que Gómez-Mullet desapareció el 20 de febrero, después de que una persona que llamó al 911 dijera que no se había sabido de ella desde la tarde del 18 de febrero, cuando se dirigía a la casa de Colón.

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Colón luego le dijo a la Policía que se casó con la mujer desaparecida "después de conocerla como parte de un trato de que ella cuidaría de su madre a cambio de la ciudadanía estadounidense a través del matrimonio". Colón había acusado a Gómez-Mullet de defraudar a su madre con varios miles de dólares durante varios meses.

Según la declaración jurada, Colón le dijo a la Policía que había estado en una discusión con Gómez-Mullet y "la despidió de su empleo". Después de regresar del consultorio de un médico aproximadamente una hora después, dijo Colón, Gómez-Mullet se había ido y no sabía a dónde.

Tres días después, el 23 de febrero, se localizó un bolso ensangrentado a menos de una milla de la casa de Colón. Los artículos en el bolso fueron identificados por miembros de la familia como pertenecientes a Gomez-Mullet.

Cuando la Policía entrevistó a Colón al día siguiente, dijo que Gómez-Mullet había chocado contra una pared, pero negó que sufriera heridas y dijo que no la lastimó.

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Los detectives encontraron varias marcas rojas, que luego se confirmó que eran sangre, en la puerta principal de la casa de Colón. El hombre le dijo a los detectives que la sangre provenía de un corte que se hizo mientras trabajaba en la casa.

Más tarde, cuando le dijeron que se había encontrado sangre en un garaje / taller, Colón dijo que no lo había notado, pero que uno de sus perros había muerto allí hace unos cinco años. También le dijo a la Policía que había enterrado a unos seis de sus perros en el patio trasero. Se recogieron pruebas adicionales el 26 de febrero, después de que se confirmara que la sangre era humana.

Según la declaración jurada, Colón les dijo a los detectives que Gómez-Mullet estaba "nadando con los peces" y la describió como "un pedazo de (improperio)"."Busquen el cuerpo", les gritó Colon a los detectives. Cuando los detectives se marcharon, Colón les dijo con una sonrisa: "bueno, al menos no encontraron un cuerpo en mi casa".