Las tierras fueron despojadas por paramilitares .
Los predios recuperados ya están manos de los dueños.
Foto/Oficina de Restitución
18 Sep 2022 08:16 AM

Ordenan restituir predios a familias despojada por paramilitares en Córdoba

Jairo Alonso
Pérez Delgado
Los predios fueron restituidos en Montelíbano y Puerto Escondido.

El Juzgado Tercero Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras de Montería y ordenó restituir jurídica y materialmente tres predios a dos familias víctimas de despojo, abandono y desplazamiento forzado en Montelíbano y Puerto Escondido.

En ambas sentencias, el juzgado ordena a las alcaldías de estos municipios la atención en alivio y  exoneración de pasivos catastrales de los predios restituidos.

Lea aquí: No es Miami, es Soledad, con drones se vieron presuntos vendedores de droga

De igual forma, también impartió órdenes al Sena, Instituto Geográfico Agustín Codazzi, Fuerza Pública, Unidad para las Víctimas, Ministerio de Salud y Protección Social, Gobernación de Córdoba, Centro Nacional de Memoria Histórica, entre otras instituciones, con el fin de dar garantías y un retorno integral a los beneficiarios.

Uno de los beneficiados es Mario Pérez y su familia, quienes se vieron obligados a desplazarse a otra ciudad del país, en el 2014, debido a constantes amenazas, secuestros, extorsiones y asesinatos de personas cercanas a su empresa, por parte de los grupos armados al margen de la ley.

 Durante más de 25 años, con su esposa e hijos en el barrio La Candelaria de Montelíbano, lograron obtener  su vivienda propia y crear una empresa de ingeniería, fabricaciones y montajes.

Mientras que, en Puerto Escondido, en la vereda La Caña, el Juzgado Tercero, a través de una sentencia, también ordenó la restitución jurídica y material de ocho hectáreas y 7.336 metros cuadrados a Luis Martelo, quien fue víctima de despojo de tierras por la violencia.

Le puede servir: Alcalde de Barranquilla afirma que hay avances con las tarifas energéticas pero no se ha llegado a la meta

Relató que en el 2003 abandonó su parcela, ubicada en la vereda La Caña, debido al asesinato de su patrón, como consecuencia de las acciones violentas que fueron ordenadas por el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, quedando el predio en manos del grupo armado.

Posteriormente, en el año 2008 fue contactado por unas personas, quienes con intimidaciones lo obligaron a firmar la escritura de venta de su parcela.