Padres denuncian maltratos en jardín infantil en Valledupar: "Mi hijo se despierta llorando"

En el barrio Don Alberto, en Valledupar, las risas de los niños se apagaron hace semanas. Allí funcionaba SionKids Preschool, un jardín infantil que, según denuncian varios padres, se convirtió en el escenario de castigos, encierros y miedo para pequeños entre dos y cinco años.

Lea también: Consejo Gremial de Bolívar exige al Gobierno reactivar recursos para obras del Canal del Dique

Todo comenzó con una frase que estremeció a una madre: “La miss me llevó al cuarto oscuro porque me porté mal”. Su hijo, de apenas cuatro años, lloraba al recordar lo que vivía en el lugar donde debía aprender y jugar. A partir de ahí, otras familias comenzaron a escuchar historias parecidas.

Los niños contaban que los encerraban en un cuarto sin luz, que los bañaban con agua fría cuando se portaban “mal” y que recibían pellizcos y regaños constantes. Algunas madres notaron cambios en sus hijos: pesadillas, miedo a la oscuridad y tartamudez.

La situación salió a la luz durante una reunión de padres, cuando se reveló que los niños eran presuntamente maltratados. “Mi hijo se despierta llorando, tiene miedo a la oscuridad y ya no quiere ir al colegio”, relató una de las madres afectadas.

Ante las denuncias, la Alcaldía de Valledupar, la Policía de Infancia y Adolescencia, el ICBF y la Secretaría de Gobierno sellaron el lugar. “Al parecer no tenían licencia ni permiso, lo cual conlleva a una investigación sobre el inmueble”, explicó el secretario de Gobierno, Félix Valera Ibáñez.

La secretaria de Educación Municipal, Karol Lobo, señaló que el caso se conoció gracias a los medios de comunicación y reiteró el llamado a las familias para que interpongan denuncias formales. “Actuamos de manera articulada con los entes de control, pero necesitamos que los padres también formalicen sus denuncias para avanzar en los procesos legales”, sostuvo.

Hoy las puertas del jardín permanecen cerradas, y en el barrio aún se habla en voz baja del “cuarto oscuro”. Los padres piden justicia y acompañamiento para sus hijos, que aún temen apagar la luz al dormir.

Le puede interesar: Conductor de bus agredido en presunto hecho de intolerancia en el centro de Barranquilla

“Solo queremos que se haga justicia y que esto no vuelva a pasar con ningún niño”, dijo una madre de familia.