
Falleció la monja francesa Lucile Randon, también conocida también como hermana André, considerada actualmente como la más longeva del mundo. Murio este 17 de enero a sus 118 años en una residencia de ancianos en Toulon, Francia, a menos de cuatro años de superar la edad de fallecimiento más elevada jamás registrada 122 años y a menos de un mes de celebrar sus 119 años.
Puede leer: No te lo esperabas, esta semana se va la luz en Cartagena
La mujer nació el 11 de febrero de 1904 en Alè, y según un comunicado de Guinness World Records publicado tras su muerte, se convirtió en la segunda persona francesa y europea más longeva de la historia, así como la monja más anciana que jamás había vivido.
La mujer trabajó como institutriz para familias adineradas en París antes de bautizarse cristiana a los 26 años, y se dedicó al cuidado de los niños durante la Segunda Guerra Mundial, tarea que continuaría durante 28 años después del conflicto, en el hospital de la ciudad de Vichy.
Lee aquí:Prima de Yared de Pomares, joven asesinada en Torices afirma que su pareja sí la mato
La hermana André ya tenía muchas limitaciones en sus sentidos: estaba ciega y en una silla de ruedas. Nunca ocultó el cansancio que ya sentía y hasta expresó en una entrevista que le estaba pidiendo a Dios que llegara pronto su muerte, pero que Él seguramente estaba sordo.